Fosa

Ejemplar adulto de fosa.

Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Orden: Carnivora
Familia: Eupleridae
Subfamilia: Euplerinae
Género: Cryptoprocta
Especie: Cryptoprocta ferox
Nombre común: Fosa
Estado de conservación (UICN): Vulnerable (VU)










La fosa es el mamífero carnívoro más grande que existe en Madagascar y el depredador dominante. Su aspecto puede recordar al de un félido, pero en realidad pertenece a una familia diferente: la de los eupléridos. Actualmente se encuentra clasificada como Vulnerable por la UICN.

Descripción

La fosa puede recordar a primera vista a un félido, pero en realidad pertenece a la familia de los eupléridos. Es el carnívoro más grande de Madagascar, como también el euplérido más grande del mundo. Puede llegar a alcanzar los 80 centímetros de largo, además de una cola que tiene aproximadamente la misma longitud de su cuerpo, y unos 10 kilogramos de peso. Los machos son algo más grandes y pesados que las hembras.

Son animales de cuerpo alargado, musculoso y ágil. Con el pelaje corto, relativamente denso y de color marrón-rojizo por el lomo y crema en el vientre en los adultos y gris o blanquecino en los individuos juveniles.

Su larga cola y sus garras retráctiles le ayudan a la hora de trepar y mantener el equilibrio en los árboles y atrapar a sus presas. Sus patas son semiplantígradas: es capaz de cambiar entre un paso plantígrado cuando se encuentra en lo alto de los árboles (apoyando toda la planta de las patas) y un paso digitígrado en tierra (apoyando sólo los dedos de las patas).

Distribución y hábitat

Distribución de la fosa
(© IUCN RedList)

La fosa habita en la isla de Madagascar, y es el carnívoro más expandido de toda la isla, repartiéndose a lo largo de la circunferencia. Prefiere bosques húmedos no alterados, aunque también se pueden encontrar en menor abundancia en algunos bosques más degradados o de ambiente más seco.

Alimentación 

Es el único mamífero carnívoro de toda la isla, lo que le convierte en el depredador dominante. Suele cazar animales de pequeño o mediano tamaño, sobre todo lemures (que constituyen más de la mitad de su dieta). También se puede alimentar, aunque en menor medida, de pequeños reptiles, aves, e incluso invertebrados (entre los que se cuentan insectos y crustáceos). 

Las fosas suelen cazar de manera individual, persiguiendo a sus presas por los árboles o en el suelo, aunque en la época de reproducción se pueden llegar a reunir en pequeños grupos consistentes en la pareja con o sin los juveniles.

Comportamiento

Pueden estar activas tanto por el día como por la noche (es una especie catemeral) y no suele utilizar el mismo nido para dormir. Sólo las hembras con crías lo hacen. 

Las fosas se comunican con sonidos (que incluyen ronroneos y diferentes llamadas), olores (marcados en el territorio en rocas, árboles y el suelo utilizando sus glándulas anales y el pecho) y señales visuales.

Reproducción

Las fosas tienen un sistema de reproducción poliándrico (esto es, una hembra puede reproducirse con varios machos diferentes), y la cópula puede darse entre septiembre y octubre en lo alto de un árbol, cerca de una fuente de agua, que usarán año tras año. Es la hembra la que decide con qué machos se reproduce, y estos compiten entre sí por su favor. Este sistema de reproducción, en el que las hembras monopolizan un lugar y maximizan el número de apareamientos, parece ser único entre los carnívoros.

Después de unos noventa días, entre diciembre y enero, la hembra da a luz normalmente entre dos a cuatro crías, ciegas y sin dientes. Los recién nacidos tienen el pelaje de color pardo o casi blanquecino y no abren los ojos hasta pasadas dos semanas después de su nacimiento, momento en el que se vuelven más activos y su pelaje se oscurece. Las crías no toman alimentos sólidos hasta los tres meses de edad y no abandonan el nido hasta los cuatro o cinco meses. Después del primer año se vuelven independientes de su madre y a los dieciocho o veinte meses les aparece la dentadura definitiva. No alcanzan la madurez sexual hasta los tres o cuatro años de edad, aunque la madurez física la obtienen a los dos.

Amenazas 

Al depender del bosque para vivir, la fosa se ve amenazada por la destrucción y fragmentación del hábitat en el que reside.

La mala fama de este animal también se ha convertido en una amenaza para él, y a causa de ella ha sido perseguido y cazado. En el distrito de Marolambo, la fosa ha sido odiada y temida al ser considerada un animal peligroso. Fue descrita como un animal agresivo y avaricioso, conocido por cazar pollos y crías de cerdos de los ganaderos. Se ha llegado incluso a crear oscuras leyendas alrededor de ella, entre las que se incluyen el secuestro de niños pequeños que deambularan solos por los bosques o la toxicidad de su carne para el que la consumía.

Conservación

La fosa fue clasificada como "Vulnerable" por la UICN, después de que sus poblaciones mermaran un 30% entre 1987 y 2008.

Se estima que existen 2.500 fosas adultas en áreas protegidas. Entre ellas, el Parque Nacional de Masoala y de Midongy-Sud, que recoge unas 500. Sin embargo, las estimaciones sugieren que ninguna de estas áreas soporta una población viable para su supervivencia. De ser esto cierto, la extinción de la fosa podría ocurrir en unos 100 años, a medida que las poblaciones fueran decreciendo paulatinamente.

Extras

La fosa apareció en la película de Dreamworks, Madagascar (2005), como uno de los principales antagonistas y depredadores de los lemures que aparecen la película.